Ir al contenido principal
Tú puedes participar activamente en esta campaña y exigir a los legisladores que hagan una reforma seria y reduzcan el financiamiento a los partidos políticos. Si apoyas esta propuesta, se enviará un mensaje a las y los diputados (ver lista) a cargo de las Mesa Directiva, la Junta de Coordinación Política, y las Comisiones de Presupuesto, y de Puntos Constitucionales.

DESEO ENVÍAR CORREO

Este es el texto que se le enviará a los diputados:

¡Ya Bájenle!: Menos dinero a partidos

Estimado Sr. (a) diputado (a)

El único presupuesto blindado por Ley para 2010 es el financiamiento por $3,012 millones de pesos para los partidos políticos. Esta es la única fórmula presupuestal incluida en la Constitución.

Habrá reducciones para salud y educación, para seguridad y programas contra la pobreza, para agua y caminos. Si no hacemos algo para evitarlo, el presupuesto para los partidos será intocable.

Un conjunto plural de organizaciones y ciudadanos (as) exigimos al Congreso de la Unión y en particular a la Cámara de Diputados que además de otros recortes a privilegios y gastos onerosos, reduzca el presupuesto a los partidos.

Para reducir el monto del financiamiento público a los partidos bastaría cambiar la fórmula de cálculo. Una opción razonable es que en lugar de multiplicar por el número de electores en el padrón, se multiplique por el número de votos válidos.

Esta nueva fórmula puede aplicarse desde el próximo presupuesto para 2010. El monto debe calcularse multiplicando el 65% del salario mínimo por el número total de votos válidos emitidos en la elección de 2009.

La fórmula que proponemos permitiría un ahorro de alrededor de 1,700 millones de pesos. Además, genera incentivos para que los partidos políticos promuevan la participación y traten de convencer a la ciudadanía para reducir el abstencionismo. Es una aplicación congruente con un presupuesto por resultados.

Exigimos a la Cámara de Diputados que en el Decreto del Presupuesto de Egresos de la Federación para 2010 que apruebe haya una reducción significativa, de preferencia aplicando la fórmula propuesta.

Atentamente,

Un(a) ciudadano (a) más que quiere que la política se haga con argumentos, no con dinero.

----
!Ya Bájenle!: Video de Sergio Aguayo, investigador del COLMEX, sobre el tema del financiamiento a los partidos políticos en México.


!Ya Bájenle!: Video de Denise Dresser, investigadora del ITAM, sobre el tema del financiamiento a los partidos políticos en México.

Comentarios

  1. Bolito Lalo31/10/09 08:47

    Totalmente de acuerdo con la Sra. Dresser, pero tengo dudas sobre si lo que tenemos ahora en las cámaras legislativas es el problema, o sólo es, el efecto del problema.
    Me parece que la calidad de nuestros legisladores corresponde al estándar de los ciudadanos producidos por la sociedad mexicana, ya que son productos hechos en México, educados y formados por la gran familia mexicana. Una sociedad mayoritariamente constituida por ciudadanos que aspiran a que “No les den, nada mas que los pongan donde hay”. Una sociedad que califica de imbécil a quien pudiendo robar, comete la estupidez de no hacerlo. Una sociedad que produce por carretadas, ciudadanos que justifican sus tranzas por la certeza de que si no las hacen ellos, seguramente otros las harán, lo cual por cierto y desgracia, es una realidad.
    ¿De que hablo? Hablo de esto:
    Londres: “Todos los años, 60,000 personas recuperan sus pertenencias por medio de la Oficina de Objetos Perdidos, y bendicen el buen nombre de la ciudadanía de Londres. Cada uno de los 135,000 artículos entregados el año pasado representa un acto de honradez por parte del público, del personal de transporte y de los taxistas…”
    México: “Cada día entre 10 y 12 personas llegan a la oficina de objetos extraviados del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro con la esperanza de recuperar el celular, la bolsa o el paquete que olvidaron en los andenes o instalaciones del sistema.
    Sin embargo, a decir de don César Castro Cisneros, encargado desde hace 26 años de la oficina, difícilmente alguno de estos objetos aparece”
    Cuando LOS MEXICANOS cambiemos esto, será entonces el momento en que tendremos los gobernantes, legisladores y funcionarios que hoy simple, paradójica y contradictoriamente exigimos tener.
    Y es que resulta muy cómodo achacar a 3,100 personas (500 diputados, 128 senadores, 1 presidente de la república, 31 gobernadores, 1 jefe de gobierno y 2,439 presidentes municipales) la responsabilidad total del desastroso estado del país, como si México fuera un país de 106 millones de habitantes particularmente honestos, comprometidos y responsables, que escoge y elige repetida y libremente a los 3,100 ciudadanos más putrefactos que puede encontrar para hacerlos sus gobernantes y/o representantes. ¡Mentira! me alcanzan los dedos de las manos para contar aquellos críticos ciudadanos que siendo parte de un gobierno, no actuaron con igual descaro y cinismo que los que hoy recriminamos. Ese es el problema.
    Estoy de acuerdo, hay que bajarle a la producción de mexicanos tipo Noroña, Bejarano, Niño Verde, Fox, Salinas, Rayito de Esperanza, Romero de Champs, Gordillo, Gober Precioso y Piadoso y demás flora y fauna nacional. Si queremos tener mejores gobernantes y representantes reconozcamos que es la sociedad mexicana quien los genera y los forja, por eso, y solo por eso, resultan pésimas las instituciones que conformamos. Sí pretendemos tener una mejor clase política, no hay que darle muchas vueltas al asunto, basta con que ¡HAGAMOS DE NUESTROS HIJOS MEJORES CIUDADANOS! y eso esta a nuestro alcance, no necesitamos ni dinero, ni leyes, ni representantes, ni Pris, ni Panes, ni Perredes, ni nada, ¡NUESTROS HIJOS APRENDEN Y FIJAN SUS VALORES DE LO QUE NOS VEN HACER!
    Dejémonos pues de hacernos patos, la conducta y valores de la clase política del mañana, nada tiene que ver con los robos de los Salinas, con las ligas de Bejarano o con el cinismo de nuestros legisladores.
    Todo mundo sueña con un México mejor, el problema es que nadie se quiere despertar.

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

El debate fomenta, el balance es la clave.